sensaciòn que
atrapè y quiero
compartir con
ustedes.
Intuyo todos
alguna vez
o mas de una
la sentimos.
Hay un sol al cual le robo un rato de placidez,
ese de invierno,al que se encuentra sin buscarlo,
ese que templa la piel,descansa los párpados,
enlentece el torrente sanguineo,ese sol cálido,
acariciador que paraliza,que aglutina saliva
en la boca,que provoca pereza en las manos,
que contiene la respiracion,que pone en
guardia el sistema auditivo,ese que pesa
y es agradable,ese que mientras me
inmoviliza deja la puerta entornada
para que solamente mi mente se mueva
a través de estos pensamientos.
Qué belleza de foto y que oportuna!...lograste captar ese momento con entrañable calidez.
ResponderEliminarUn abrazo!
Si! Ese sol si me gustá! Que entrecerras los ojos y querés quedarte ahí sintiéndo ese calorcito para siempre, que la sombra no llegue nunca...
ResponderEliminarMe hiciste pensar en los compañeros peruanos y el duro momento que están pasando, por querer disfrutar de ese sol...
Besos!!
estamos compartiendo esta linda ciudad bajo el sol, sintiendo eso que vos decís... esa pereza hogareña del invierno, ese acurrucarse en lugarcito chiquito para el corazón sea puro sol.
ResponderEliminarUn abrazo vecino!!!!
Gracias por tus palabras en mi blog y por tu visita, ya que es lo que me ha permitido conocer tu blog.
ResponderEliminarEsas palabras sopbre el sol de invierno me han gustado mucho... además es el sol que más a previo, cuando pugna por salir entre las nubes, como pidiendo permiso. Me encanta el sol de invierno. Es que el de verano me agota y me agobia un poco.
Un saludo