Colocado a través de las teclas,como un riel sobre durmientes,había un largo lápiz rojo.Cuando Celina lo tomaba,el lápiz estaba deseando que lo dejaran escribir.
Como Celina no lo soltaba,él se movía ansioso entre los dedos que lo sujetaban,y con su ojo único y puntiagudo miraba indeciso y oscilante de un lado para otro.
Cuando lo dejaban acercarse al papel,la punta parecía un hocico que husmeaba algo,con instinto de lápiz,desconocido para nosotros,buscaba un lugar en blanco donde morder el pentagrama.Por fin Celina lo soltaba y él,con movimientos cortos,como un chanchito cuando mama,se prendía vorazmente del blanco papel,iba dejando las pequeñas huellas firmes y acentuadas de su corta pezuña negra y movía alegremente su larga cola roja.
Yo nunca lo perdía de vista porque quería tener uno igual.
Así imaginaría con mis 10 años a Celina mi profesora de piano y su largo lápiz rojo que aun hoy atesoro como uno de los más bellos regalos.
Otros exponen en lo de Gus:
Solo silencio,para escuchar
Vaya Yonky, Piano... que nivel.
ResponderEliminarEs curioso el cariño que se les tiene a los lápices que han sido testigos de nuestras horas.
Sabes, ...yo colecciono lápices, tengo más de 800, pero tan sólo 3 ó 4, significan algo importante para mi.
Preciso relato, con sabor a carboncillo mordiendo el papel.
Abrazos
Puede que el amor a la música lo represente ella y ese lápiz a ella, asociaciones de ideas y sentimientos que se mueven como una marea, como olas los dedos sobre el piano, me dejo llevar por la música, precioso, perfecto, hermoso, me quedo aquí escuchando...
ResponderEliminarPrecioso Yonky
ResponderEliminarAlgunos objetos son especiales para nosotros porque nos transportan a momentos mágicos de nuestra vida.
Por lo que veo la música es muy especial para tí
Un beso de Mar
hola yonky, gracias por dedicarme esas hermosas palabras, y por compartir con todos este fantastico relato, muy conmovedor :)
ResponderEliminarla musica increible, me quedo aca por un rato :)
Chopin es mi favorito, me transporta a la mas profunda subjetividad, estado maravilloso en que la intima compañia de si mismo evoca un sentimiento sublime...
Desconocía esa faceta tuya yonki pero veo que te apasiona o por lo menos te apasionaba las lecciones con tu profesora. Siempre se puede consegir lo que se desee y tú parece que los has conseguido.
ResponderEliminarUn beso y felicidades por tu relato
Qué tiernos recuerdos!...rememorar a tu profesora y su lápiz rojo es prueba que disfrutaste tus años de aprendizaje!
ResponderEliminarMuy emotivo!
Abrazos!
Tu texto Yonki, me ha parecido muy creativo, con algunas imágenes ingeniosas y adorables; como esa humanización del lápiz, buscando un lugar en blanco donde morder, o como un chanchito a la hora de mamar... Humano y sencillo y a su vez maravilloso tu texto. ¡Bravo!
ResponderEliminarY preciosa pieza la de Chopin.
Un abrzo,
Mar
Cuando somos pequeños hay cosas que aunque parezcan simples, a nosotros nos parecen maravillosas. Ese lápiz rojo movido con maestría por tu profesora debía ser para tí una especie de milagro.
ResponderEliminarTierno y bonito relato.
Un abrazo
Hola yonky.
ResponderEliminarSin duda esa profesora dejó una honda huella en tu vida y, seguramente, ella es la responsable de tu amor a la buena música. Todos esos recuerdos se condensan en el tesoro que supone para ti ese lápiz rojo. Me he quedado maravillada de las metáforas con las que los has envuelto. Maravillada.
Un abrazo.
Maat
Hola Yonky:
ResponderEliminarLos objetos son testigos mudos de la memoria. Basta mirarlos para recordar. Tu tienes el lápiz que te entregó tu profesora de piano y a mi el polvillo blanco de las tizas me recuerda a mi profe de matemáticas. Siempre llevaba el trasero blanqueando de tiza porque se limpiaba las manos en él.
Me ha gustado la figura de comparar el lápiz a un animal husmeando el pentagrama.
Buen jueves!!!
Me ha encantado tu forma de describir esos objetos cotidianos y sus "acciones" de una forma tan mágica, como el piano y la música que tanta nos regalan!!!
ResponderEliminarBesotes
Son mis objetos, mis testigos y protagonistas a su modo, más veraces.
ResponderEliminarPor su colorido, forma, sonidos asociados, movimientos.. pero principalisimamente a causa de mi olfato. Y sus aromas.
Tésalo
Yo soy bastante atesoradora de cosas felices. Porque son cosas alegres, me despiertan una sonrisa cuando las miro o una nostalgia. hay cosas que atesoré y me desprendí de ellas sin ningún pudor, las personas cambian y las cosas alegres se vuelven dañinas o tristes.
ResponderEliminarBesos y gracias por el relato, Yon. Yo toco la viola, a ver si hacemos un duo virtual...
ADEMAS DE TU TEXT0 HE LEID0 L0S C0MENTARI0S...ELL0S N0 HACEN MAS QUE C0NFIRMARME QUE CADA DIA ESCRIBES MEJ0R...
ResponderEliminarEN CUANT0 A TU ENS0ÑACI0N...SABES, Y0NKY, EN UN PRINCIPI0 ESTE JUEVES DEBIERA DE HABER HECH0 REFERENCIA A L0S MUERT0S, A LA GENTE DEL PASAD0...Y A L0S MIED0S QUE N0S PR0DUCIAN 0 LA MISTERI0S0 RELACI0NAD0 C0N SERES QUERID0S...VAM0S, MIED0 Y MUERTE Y SERES QUERID0S...
EN CIERTA MANERA, AL D0TAR DE VIDA AL LAPIZ, HAS ID0 UN P0C0 P0R AQULLA PRIMERA IDEA QUE ME HABIA SURGID0 PARA ESTE JUEVES.
SALUDAZ0S , Y0NKY.
Qué delicia de recuerdo bañado con esta música, qué regalo tu post!
ResponderEliminarMe hiciste recordar a mi profesora de piano, que se llamaba Mariquita y usaba un lápiz negro :)
Mi mañana se pintó de tu color.
Besos.
Me ha gustado tu recuerdo de la profesora de piano, pero me ha gustado aún más, la personalización que del lápiz rojo haces, dotándolo de vida propia para deslizarse ávido sobre el pentagrama con su pequeño y afilado hocico negro.
ResponderEliminarLos objetos que amorosamente guardamos, son amados no por sí, sino que en ellos recordamos y amamos a las personas que los poseyeron.
Un abrazo.
Siempre soñe tocar el piano, me gusto mucho tu relato y el recuerdo que tienes de la profesora me llego muy adentro.
ResponderEliminarfelicidades-
Primavera
Yonki, desde aquel trazo rojo a las teclas de un piano, amor a la música te regalo Celina, en cada tecla o en cada canción, su recuerdo te acompaña con la infinita diversidad de un sonido.
ResponderEliminarHay que amar a los que no están por aquello que nos dieron para estar, nosotros, ahora. Hermoso homenaje.
Bsitoos melódicos con trazo rojo.